20 de marzo de 2010

Bits


A menudo me encuentro con personas que identifican toda la teoria de la estimulación temprana con la utilización de los bits.Dicho de otra forma, piensan que la base didáctica de la estimulación temprana se basa fundamentalmente en el empleo de los bits.

No es cierto. El empleo de los bits es sólo una pequeña parte de los mútiples soportes didácticos que nos ayudarán a la estimulación temprana.

Pero... ¿qué son los bits?

Los bits son materiales didácticos utilizados , fundamentalmente, en la etapa de la educación infantil ue ayudan al desarrollo de las inteligencias de los niños/as al mismo tiempo que los motivan y estimulan en sus aprendizajes.
Es conveniente relacionar los contenidos de los bits con la diferentes unidades de programación del curriculum ya que de esta manera se aproximan a los intereses de los niños.
Los animales salvajes, los personajes de ficción, la obra pictórica de Dalí, las flores o los edificios modernistas son algunas de las categorías de bits que se pueden proponer.


No se pretende enseñar cuestiones complicadas, a pesar de que en ocasiones lo son para los adultos y en consecuencia esta dificultad se extrapola a los niños.



A pesar de que pueda resultar chocante , debe entenderse la actividad del pase de bits como lo que es: una actividad psicopedagógica tan importante para la práctica educativa diaria en las escuelas infantiles como el resto de las actividades. Ni más ni menos.

10 de marzo de 2010

¿Qué es la estimulación temprana?


Las últimas investigaciones en el campo de la neurociencia, insisten en el profundo impacto que las experiencias tempranas, en los niños pequeños, pueden tener sobre la evolución y la capacidad del sistema nervioso. El cerebro del niño se cuadriplica en peso entre su nacimiento y los seis años. Tal cosa depende, entre otros factores funcionales, del estímulo del que haya sido objeto.

La estimulación temprana desarrolla el sistema nervioso dando al cerebro la estructura necesaria, favoreciendo las conexiones neuronales ynla creación de su red, aumentando el número de sinapsis y estimulando la mielización de los diversos axon.

Estimular significa aumentar la actividad del sistema nervioso y de los órganos sensoriales mediante estímulos, y temprana hace referencia al que nace, madura o actúa antes del tiempo establecido para ello, y/o en las primeras edades del desarrollo infantil

Así, la definición pedagógica de estimulación temprana sería:


Aumentar la actividad del sistema nervioso mediante estímulos de cualquier índole antes del tiempo ordinario, durante las primeras edades del desarrollo infantil.


La estimulación temprana pretende desarrollar y habilitar todas las inteligencias cerebrales del niño. Inteligencias entendidas en primera instancia, como potenciales biopsicológicos del homo sapiens, siendo el producto de la herencia genética y de las características psicológicas humanas. Son las llamadas inteligencias potenciales. Y en segunda, como las aptitudes, potencialidades, capacidades, habilidades, destrezas o disposiciones naturales o adquiridas, con carácter o virtualidad de aquello que puede producir o producirse, pero que no está realizado. Así, cada inteligencia potencial puede acabar siendo efectiva si el grado de estimulación del entorno es el óptimo y/o adecuado. Según el contexto sociocultural en el que el niño/a se halle inmerso/a se revelaran más o menos número de inteligencias, o emergerán con fuerza unos tipos de inteligencia frente a otros. En la cultura occidental parece que se activan y despliegan un grupo de catorce que se desarrollaran en posteriores apartados.

Las inteligencias actúan con sinergia, es decir, todas juntas funcionan más óptimamente que por separado, como un equipo de fútbol en el que cada integrante juega en una posición determinada pero su aportación ayuda a ganar al equipo. Así mismo, las inteligencias estimuladas tempranamente aportan cada una su contenido con el objetivo compartido de dar sentido a lo que acontece. Si se combinan todas las inteligencias, esta garantizada la eficacia en cualquier ámbito de la vida de un niño; si se integran sólo algunas, la efectividad se reduce a algunas esferas; y, si la combinación con las demás no es posible o sólo se logra estimular una inteligencia, la aptitud se reduce en una peculiaridad.

El objetivo principal que persigue la estimulación temprana de las inteligencias es que el niño resuelva situaciones problemáticas, es decir, que afronte una realidad en la que ha de solventar o superar un conflicto o una dificultad escogiendo para ello el mejor procedimiento. Para superar con éxito un problema deben de intervenir el mayor número de inteligencias efectivas y sus procedimientos: observación, atención, repetición, memorización, movimiento, expresión, copia, imaginación, creación, manipulación, exploración, relación, análisis, probabilidad, lógica, tanteo, deducción, ordenación, generalización, hipotetización, investigación, descubrimiento, discriminación, categorización, asociación, revisión, actuación, imitación, comportamiento, emoción, juego, reflexión, pensamiento, metacognición, resolución,..., etc.

Para que la estimulación temprana de las inteligencias pueda desarrollarse con total garantía hay que respetar tres principios o leyes fundamentales: la frecuencia, entendida como la habituación en la repetición del estímulo con asiduidad. La intensidad, como la energía a la hora de aplicar el estímulo con fuerza, vehemencia y viveza. Y, por último, la duración, como la persistencia en el tiempo de aplicación del estímulo.